Made in France: una garantía de calidad y excelencia

Desde hace varios años, el origen y lugar de producción de los productos que compran consumidores y profesionales han adquirido una gran importancia.

La crisis sanitaria vinculada a la epidemia de Covid-19 ha acentuado aún más esta tendencia, con un pronunciado deseo por parte de los compradores de adquirir productos fabricados en Francia.

En este artículo, NatéoSanté habla de su enfoque “Made in France”, que forma parte de sus valores, así como de las leyes que regulan la fabricación francesa y de la imagen de la que goza, tanto a nivel nacional como internacional.

Según una encuesta de Ifop realizada en julio de 2018, el criterio “Made in France” tiene un significado especial para muchos franceses, sobre todo porque la fabricación francesa se asocia con el apoyo al empleo y al saber hacer nacional.

Esta es una de las razones por las que NatéoSanté eligió producir sus soluciones de purificación de aire en Francia hace varios años.

Para seguir con nuestra voluntad de favorecer el saber hacer de las empresas más cercanas geográficamente, hemos dado un paso más allá, decidiendo trabajar con socios situados en las inmediaciones de nuestras instalaciones, entre Nantes y Pornic. La mayoría de ellos, como el diseñador de nuestros electrodomésticos, se encuentran en la región de los Países del Loira, a menos de 100 kilómetros de nuestra sede. Los componentes de nuestros purificadores de aire profesionales se producen, ensamblan y embalan localmente.

La crisis de Covid-19 ha aumentado la predisposición de las empresas francesas a deslocalizar sus compras en el territorio, como demuestra un estudio de Agile Buyer. Actualmente, una cuarta parte de ellas desea deslocalizar sus suministros en Francia o en Europa (frente al 16% a principios de 2020).

Además, desde hace muchos años, estamos profundamente comprometidos con un enfoque de RSE (Responsabilidad Social Empresarial), sobre todo en términos de desarrollo sostenible. Por ello, nuestros productos están diseñado de forma ecológica para limitar su impacto medioambiental a lo largo de su ciclo de vida. En concreto, usamos materias primas no emisivas y materiales sin aditivos. Nuestros purificadores de aire profesionales consumen poca energía y forman parte de un enfoque sostenible, con posibilidad de reparación y reciclaje de sus componentes.

Las marcas no pueden poner la etiqueta “Made in France” en sus productos sin cumplir una serie de reglas y normas impuestas por las leyes nacionales y europeas.

Para poder afirmar que sus productos están fabricados en Francia, una empresa debe asegurarse de que cumplen los criterios de origen no preferencial establecidos por el Código Aduanero y la Unión Europea. Estas normas permiten establecer la “nacionalidad” de un producto cuando en su fabricación intervienen factores de producción de varios países.

Según la Comisión Europea, «se utilizan dos conceptos básicos para determinar el origen de las mercancías: los productos enteramente obtenidos y los productos que han sufrido una transformación final sustancial».

Esto significa, en la mayoría de los casos, que el producto final ha cambiado su código aduanero (el código aduanero del producto final es diferente del de las materias primas y los componentes). Esta norma se aplica a determinadas categorías de productos, como los cosméticos, los juegos de mesa, etc.

Estos productos deben respetar un límite mínimo de valor añadido producido en Francia del precio ex fábrica.

Los purificadores de aire NatéoSanté pertenecen, evidentemente, a esta última categoría de productos enteramente obtenidos, ya que su diseño, fabricación, ensamblaje y embalaje se realizan íntegramente en Francia.

Inicialmente orientada a la promoción de start-ups en el ámbito puramente tecnológico, la French Tech incluye también empresas de dimensión industrial.